Inician su colaboración en el año 2010. Su trabajo conjunto se enfoca en los procesos perceptivos y recurren a la tecnología como medio para modular la experiencia que construyen. Trabajan con los conceptos de repetición, cambio, extrañamiento y traducción.
Valiéndose de procesos “hechizo” (argot popular para “invento”), desmontan y construyen dispositivos que buscan generar una colisión entre lenguaje, visión, tacto, sonido y movimiento.
Verónica estudió escultura en la Pontificia Universidad Católica del Perú y realizó el Programa de Estudios Independientes del Museo de Arte Contemporáneo de Barcelona así como el Master de Producción e Investigación Artística de la Universidad de Barcelona. Álvaro Icaza concluyó sus estudios de Bellas Artes de la Universidad de Barcelona.